martes, 15 de octubre de 2013

El Consumo de Uva Contribuye a Reducir el Riesgo Cardiovascular y Padecer Cánceres

El consumo de uva es adecuado para personas de todas las edades y como alimento tiene un papel destacado en la composición de una dieta equilibrada, con múltiples beneficios que se derivan de su composición. Actualmente se valora especialmente su potencial antioxidante que puede contribuir a controlar factores de riesgo de ciertas patologías crónicas, entre ellas las cardiovasculares –disminuyendo la oxidación del denominado colesterol ‘malo’ que se convierte así en una sustancia más agresiva contra las arterias y vasos–, o ciertos tipos de cáncer, en especial el de mama Eso sí, todo esto siempre en el contexto de la dieta mediterránea sana y equilibrada, según asegura el presidente del Comité Científico de la Sociedad Española de Dietética y Ciencias de la Alimentación (SEDCA), Jesús Román.

De hecho, según señala www.elcorreo.com, el Centro Superior de Investigaciones Científicas evaluó el pasado mes de abril el efecto preventivo de un extracto de uva incorporado a un complemento alimenticio (el Stilvid® Cardio) y demostró que mejoraba hasta en un 57% once biomarcadores asociados a una mayor probabilidad de sufrir una enfermedad cardiovascular en pacientes sometidos a un tratamiento completo –ya anteriormente el CSIC había patentado una fórmula rica en extracto de uva enriquecida con resveratrol que no solo disminuía el estrés oxidativo, sino que ralentizaba el envejecimiento celular y mejoraba varios marcadores de riesgo cardiovascular.
Y es que aunque las cardiovasculares son la primera causa de muerte en el mundo esta se podría prevenir en un 80% de los casos con medidas de prevención entra las que destacan una dieta correcta y equilibrada rica en frutas y verduras.
En relación al cáncer, diversos estudios han demostrado el vínculo entre las uvas y su prevención, incluida su capacidad para inhibir el crecimiento de las células cancerígenas en algunos tipos específicos comoel de colon, estómago o mama –concretamente las investigaciones de este último se llevaron a cabo con zumo de uva Concord–. Con todo, hay quienes deben tomar precauciones, ya que su consumo aunque aconsejado debe ser «prudente» en personas que sigan una dieta restrictiva hipocalórica: probablemente se prefieran en ciertas fases del régimen otras frutas con menor aporte de azúcares.
También los diabéticos podrán consumirlas siempre y cuando consulten con su médico y sigan sus indicaciones y las cantidades que este les aconseje. De otro modo, la ración diaria recomendable para una persona sana es de entre 100 y 120 gramos. Conviene tener en cuenta también las destacables diferencias existentes entre las uvas frescas y las pasas, ya que estas últimas son cuatro veces más ricas en azúcares, pero también ven incrementados el resto de nutrientes por lo que su contenido en fibra, vitaminas y minerales es mucho más alto.
Propiedades nutritivas
Las uvas se componen de agua (85 por ciento) y azúcar disuelta (15 por ciento). Ricas en ácido fólico y vitaminas, sobre todo B6, C y provitamina A, es interesante su aporte de minerales como el hierro, que sirve para combatir la anemia ferropénica, o el potasio, diurético. Consumidas con piel y semillas son una excelente fuente de fibra y su contenido en flavonoides y otros antioxidantes vegetales –especialmente en las tintas– tienen un efecto positivo en la salud cardiovascular y pueden contribuir a reducir el riesgo cardiovascular y otros factores de riesgo de patologías crónicas.

Elaboración del Mezcal: Una Tradición Milenaria

Arte, cultura, tradición y herencia se conjugan en el proceso de elaboración del mezcal, bebida originaria del estado de Oaxaca, que pese a su sabor, olor y vigencia enfrenta una dura competencia con productos extranjeros, aseguró el maestro destilador Alberto Morales Méndez.
Orgulloso de su herencia mezcalera y consciente de que en México se ha perdido la tradición y el verdadero significado de lo que es la bebida de agave, el mezcalero compartió que la elaboración de este aguardiente es un proceso artesanal, desde su cocción en un horno debajo de la tierra hasta su destilación en alambiques de cobre.
La molienda es con molino egipcio jalado por un caballo y las fermentaciones se llevan a cabo en tinas de madera; todo sigue siendo tradicional y artesanal, detalló Morales Méndez, quien, a través de su arte, transmite la herencia de sus antepasados, hombres sabios de tierras zapotecas.
La elaboración del mezcal comienza cuando, después de ocho o nueve años, la siembra del maguey llega a su madurez.
De acuerdo con la fuente, para preparar el maguey se cortan las pencas hasta dejar limpia la “piña”, cuyo nombre deriva del aspecto que adquiere el tallo después del corte.
Posteriormente, se selecciona según su tamaño, para facilitar su manejo y cocción dentro de un horno cónico hecho en la tierra, el cual fue calentado previamente a base de leña.
Las “piñas” se acomodan en el horno y se cubren con bagazo y mantas durante tres días. Al llegar al punto de cocción ideal, éstas son removidas y colocadas dentro de un aro de piedra, para iniciar la molienda.
El maguey machacado se coloca dentro de barricas de roble, con capacidad de 300 galones, y se añade una pequeña porción de agua.
El resultado de la mezcla es el tepache, que se deja descubierto para su fermentación natural; dicho proceso dura de cuatro a 30 días, dependiendo de la temperatura ambiente.
Luego el tepache es transferido a un alambique de cerámica, y un sombrero de cobre se le coloca arriba; la mezcla se calienta, evapora y condensa lentamente, a través de un serpentín que deposita el líquido en un recipiente de recolección.
La fibra es retirada del alambique y el alcohol puro de la primera destilación se le coloca nuevamente; el líquido resultante es el exquisito mezcal, una milenaria bebida del estado de Oaxaca.
De ese estado es, también, “Wahaka”, el mezcal que Morales Méndez creó utilizado procesos de destilación de más de 400 años de antigüedad.
Somos la quinta generación de mezcaleros. Mi familia siempre ha hecho mezcal, lo hacían y lo vendían a granel, y el crédito nunca ha sido para el verdadero productor, de ahí que lo que queremos hacer ahora es ser los dueños de la marca.
A veces las personas se van por lo que está de moda y dejan de consumir lo nuestro, incluso en ocasiones desconocen qué es el mezcal y optan por productos extranjeros. El mezcal, además de que puede acompañarse con todo, es un auténtico producto mexicano, manifestó.
Al cuestionarlo sobre el por qué del nombre, señaló que uno de los objetivos es recuperar las tradiciones perdidas y cambiar la imagen que se tiene del mezcal; “quisimos hacer algo muy fácil de recordar y, sobre todo, que abarcara el estado del que es originario”, anotó.
Con esta bebida,  buscará recuperar la tradición del mezcal, ya que la base de la empresa es brindar los conocimientos que se tienen sobre el mezcal, sus bondades, características y tipos.
“Una vez que les explicas lo que es el mezcal créeme que se vuelve su bebida favorita”, aseguró Alberto Morales, quien desea que esta pasión por el mezcal la continúe su hijo con orgullo y respeto, como lo hizo su abuelo y tatarabuelo, quienes dentro de la comunidad se distinguieron como huehuetes (hombres sabios) y mezcaleros.
El mezcal, que en náhuatl quiere decir “La casa de la luna”, es una bebida de tradición milenaria en México. Es 100 por ciento de agave y está hecho con la piña del maguey.
En Oaxaca existe una antigua tradición en cuanto a la elaboración del mezcal, y las regiones más antiguas donde se produce son: La Cañada de Quiatoni-Narro, Distrito de Yuatepec, Tlacolula, Ocotlán, Miahuatlán, Ejutla, Matatlán y Sola de Vega.
Fuente:
elfinanciero.com.mx
Septiembre 15, 2013

jueves, 3 de octubre de 2013

Tomar Frutos Secos A Diario No Engorda y es Bueno para el Corazón

El científico Joan Sabaté, pionero en las investigaciones que relacionaron los frutos secos con la disminución del riesgo de enfermedad cardiovascular, ha asegurado que un consumo moderado de estos alimentos no conlleva un aumento de peso y recomienda su consumo diario.
Sabaté ha explicado a aquellas personas que todavía tienen reticencias a comer frutos secos por miedo a ganar kilos, que una de las razones por las que no engordan, si se comen de forma moderada, es por el poder saciante al ser ricos en grasa y proteína. “Al comerlos dejamos de comer otras cosas”.
Además, mientras que la energía de un aceite líquido se asimila en su totalidad, el que aporta un fruto seco masticable y con fibra hace que entre el 10 y 20% de grasa nunca llegue a nuestra sangre, igual que entra, sale.
Por lo tanto, entre los porcentajes que se muestran en la tabla de composición de los alimentos y lo que de ello se asimila hay una diferencia negativa. Aunque todavía no está probado científicamente, Sabaté también mencionó que es posible que la composición de los frutos secos aumente el metabolismo basal.
Si una persona come habitualmente frutos secos le puede cambiar el metabolismo y consumir más calorías sin hacer nada, al contrario del que no come nueces. Las nueces, el mejor fruto seco para la dieta mediterránea
Este profesor ha señalado que las nueces son el fruto seco que mejor se complementa con la dieta mediterránea al ser rico en ácidos poliinsaturados u omega 3, mientras que en una dieta anglosajona, que utiliza el aceite de maíz, es más recomendable los pistachos, almendras y avellanas, con ácidos moninsaturados, una grasa similar a la del aceite de oliva. También se ha demostrado que baja el colesterol.
Hay que comer todo tipo de frutos secos, pero si estás en un país mediterráneo, no te olvides de las nueces, y en un país anglosajón no olvidar las almendras, pistachos y avellanas. La percepción de que los frutos secos son sanos es un hecho, su ingesta puede disminuir un 50% la posibilidad de infarto.
En los últimos veinte años, tras diferentes estudios, como los precursores de la Universidad de Loma Linda, se ha ratificado que comer regularmente frutos secos (30 gramos diarios es la cantidad recomendada) disminuye en un 50 por ciento el riesgo de sufrir un infarto de miocardio o de morir de una cardiopatía isquémica.
La abrumadora mayoría de las investigaciones (el más reciente es el estudio Predimed) apuntan a que comer un puñado al día disminuye un 10 por ciento del colesterol malo y no varía el bueno, mientras que los triglicéridos también bajan, reduciendo así el riesgo cardiovascular.
Fuente
Agroinformación.com
Septiembre 22, 2013

Beber Whisky es Bueno para la Salud

Se sabe que el efecto del whisky, en su justa medida, beneficia nuestra salud.
De todos es sabido que el consumo de alcohol es beneficioso para la salud y reduce el riesgo de contraer distintas enfermedades cardiovasculares. De hecho, está demostrado por algunos estudios científicos  los beneficios del whisky para el corazón y la salud en general.
Aunque parezca mentira, el whisky es una bebida perfecta para llevar una dieta saludable puesto que es bajo en grasas.
Según un estudio realizado en Estados Unidos, se ha comprobado que 45 ml de whisky no tienen ningún tipo de grasa. Además, la cantidad de azúcar en esa medida es de solo 0,04 gramos, cantidad que el organismo descompone y transforma en energía.
Otro de los beneficios que resaltan en distintos estudios realizados por universidades de todo el mundo es que el whisky te ayuda a reducir algunos problemas de salud. El consumo moderado de alcohol reduce en un 50 % el riesgo de padecer demencia senil o derrames cerebrales. Incluso se ha llegado a afirmar que reduce el riesgo de diabetes entre un 30 y un 40 por ciento.
Hablando acerca de prevención de enfermedades, el whisky reduce el riesgo de cáncer. Esto no quiere decir que por beber este destilado no vayas a tener problemas, pero el ácido elágico que contiene el whisky es un antioxidante que destruye células cancerígenas.
Fuente:
Whiskies.net
Septiembre 10, 2013

Las tres principales infecciones alimentarias

CampylobacterE. coli y Salmonella son las tres bacterias más implicadas en casos de infecciones alimentarias en la UE


Durante el año 2011, la zoonosis que más casos ha dado en los países europeos ha sido campylobacteriosis, cuya incidencia ha ido en aumento en los últimos cinco años. Le siguen de cerca los casos de E. coli, con un claro ascenso también durante el mismo año, debido sobre todo a la mal denominada crisis del pepino, ya que en realidad los responsables fueron brotes de semillas germinados. Aunque continúa descendiendo, Salmonella es el tercer patógeno más detectado, según el informe de la Unión Europea sobre tendencias y fuentes de zoonosis, los agentes zoonóticos y brotes de origen alimentario en 2011, que un año más elabora la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) y el Centro Europeo para la Prevención y Control de Enfermedades (ECDC). El artículo detalla la tendencia de estos tres patógenos y las principales formas de prevenirlos.


Las zoonosis son infecciones que se transmiten de forma directa o indirecta entre animales y personas. En la mayoría de los casos, la infección se produce a través del consumo de alimentos contaminados. En estos casos, los agentes infecciosos incluyen bacterias como SalmonellaCampylobacter, virus como el norovirus o hepatitis A y parásitos como Trichinella, según informa la EFSA, que cifra en más de 320.000 los casos humanos que se confirman cada año en la UE. La prevención de estas enfermedades incluye actuar desde la granja a la mesa, ya que se puede producir en la granja (primera fase de producción), durante el sacrificio de los animales, en el transporte y, por último, en la cocina.

Baja Salmonella, aumenta Campylobacter y E. coli

A pesar de que uno de los datos que se extraen del informe es positivo, ya que se mantiene la tendencia a la baja de casos de Salmonella, en 2011 aún ha sido la segunda causa más frecuente de enfermedades en personas. Ello indica que los controles que se aplican para recortar los casos son efectivos, sobre todo enaves, y que no debe bajarse la guardia para conseguir mantener la tendencia de los últimos años. No ocurre lo mismo con Campylobacter y E. coli que, a diferencia de Salmonella, continúan aumentando.
Los expertos destacan la necesidad de intensificar también los controles de estas bacterias en toda la cadena alimentaria
Los expertos destacan la necesidad de intensificar también los controles de estas bacterias en toda la cadena alimentaria. Según los nuevos datos, durante 2011 se han producido un 2,2% de casos más de Campylobacter que durante 2010. En cuanto a los casos registrados de E. coli, los expertos atribuyen el aumento (casi 9.500 casos confirmados), al brote de la cepa O104:H4 en Alemania y Francia asociado a las semillas germinadas. Debe tenerse en cuenta que la seguridad microbiológica de los alimentos está muy influenciada por múltiples factores a lo largo de toda la cadena alimentaria, desde la granja a la mesa, y que las poblaciones de los patógenos más relevantes en seguridad alimentaria no son estáticas.
Los patógenos citados han demostrado tener capacidad para aprovechar "nuevas oportunidades", es decir, para generar nuevos problemas de salud pública, por ejemplo resistencia a los antimicrobianos. Además, debe tenerse en cuenta que surgen de forma constante nuevos patógenos transmitidos por alimentos ya que estos evolucionan en respuesta a los retos medioambientales y, al hacerlo, demuestran nuevas capacidad de virulencia. También cambia la susceptibilidad de las personas a estas infecciones, lo que explica que las enfermedades transmitidas por los alimentos sea un tema constante de salud pública, a pesar de las mejoras en la producción de alimentos, procesamiento, conservación y preparación.

Principales formas de prevención

A pesar de que las zoonosis se comportan de manera distinta y, por tanto, la prevención requiere enfoques y medidas individuales, algunas prácticas proporcionan un nivel de protección general:
  • Una correcta higiene personal. Lavarse las manos después de tocar animales y antes de preparar o comer alimentos.
  • Preparación higiénica de alimentos. Las enfermedades transmitidas por los alimentos se pueden evitar, en gran medida, a través de un procesamiento correcto y preparación higiénica de los alimentos.
  • Mantener los animales sanos. La bioseguridad agrícola y la aplicación de programas de sanidad animal juegan un papel decisivo en la reducción del riesgo de transmisión de enfermedades zoonóticas


    LAS OTRAS ZOONOSIS

    Las zoonosis, además de transmitirse por alimentos de origen animal contaminados, también pueden transmitirse a través de otros agentes. Se habla de vectores u organismos vivos que transmiten agentes infecciosos de un animal infectado a otro animal o persona. Se contaminan sobre todo a través de mosquitos, garrapatas, moscas o pulgas. También se pueden infectar a través de contacto directo o proximidad con animales infectados como la gripe aviar, una enfermedad que afecta a aves de corral y otras aves.
    También los cerdos pueden ser portadores. Se han reportado casos de contaminación que se transmite de personas y animales a través del contacto con aves infectadas. Otro ejemplo de este tipo de zoonosis es la fiebre Q, provocada por Burnetti Coxiela y que puede encontrarse en ganado y aves. Las personas se infectan sobre todo por inhalación de polvo contaminado con bacterias de los fluidos de la placenta, así como a través de agua contaminada. E. coli, además de transmitirse a través de alimentos contaminados, también puede pasar por el medio ambiente.

    Fuente: 
    • Por MARTA CHAVARRÍAS
    •  
    • 2 de mayo de 2013
      Tomado de: 
    http://www.consumer.es/seguridad-alimentaria/sociedad-y-consumo/2013/05/02/216590.php


Cómo Entender una Etiqueta Nutricional

 

Cada vez más personas se preocupan por su nutrición, y por esta razón es importante aprender a leer correctamente la tabla nutrimental que se encuentra en las etiquetas de algunos alimentos. De acuerdo a la Nutrióloga del Instituto de Nutrición y Salud Kellogg´s (INSK), Tania Aguilar López, no sólo se trata de ver qué tantas calorías tiene un alimento, sino también de aprender a escoger el mejor producto para una mejor nutrición. A continuación, se explican los conceptos más comunes que se identifican en las etiquetas:

1.   Porciones: en una tabla nutrimental lo primero que debe identificarse es el tamaño de la porción y el número de porciones por envase. Esto es especialmente importante ya que algunos productos pueden contener en un mismo envase varias porciones. Por ejemplo, si un producto señala que tiene 4 porciones por envase y finalmente se come o bebe todo lo del envase, significa que tanto las calorías como la cantidad de nutrimentos que aporta se deberá multiplicar por 4.

2. Contenido energético: se expresa en kilocalorías o en kilojoules. La unidad más utilizada es la de las kilocalorías (kcal), por lo que son en éstas en las que nos debemos fijar. Las kcal nos señalan la cantidad de energía que proviene de los carbohidratos, proteínas y grasas contenidas en el alimento. Un producto se considera bajo en calorías cuando aporta menos de 40 kcal por porción de 30 gramos o más.

3. Proteínas: ayudan a conocer la cantidad de proteínas que contiene un alimento. Se expresa en gramos.

4. Grasas: algunos productos pueden solamente incluir grasa total, aunque otros pueden desglosarla en grasa saturada, grasa monoinsaturada y grasa poliinsaturada. Todo se expresa en gramos y nos ayuda a saber no solo la cantidad de grasa, sino el tipo de grasa que tiene un alimento.

5. Colesterol: a pesar de ser un tipo de grasa, el colesterol siempre se encontrará señalado en las tablas nutrimentales. Es importante señalar que el colesterol solo se encuentra en alimentos de origen animal y en alimentos que utilizan leche o huevo en su preparación.

6. Carbohidratos disponibles: son los carbohidratos que el cuerpo puede utilizar como energía. Estos carbohidratos pueden encontrarse naturalmente en el alimento o pueden ser añadidos como parte de la preparación. Aquí se toman en cuenta almidones y azúcares como la sacarosa, la glucosa, la fructosa y la lactosa. En este caso la fibra no forma parte del contenido de alimentos disponibles.

7. Fibra: indica la cantidad de fibra que tiene un alimento, la fibra dietética representa el total, mientras que también se puede desglosar en fibra soluble y fibra insoluble. Se considera que un alimento es buena fuente de fibra cuando aporta al menos 2.5 g de fibra por porción.

8. Sodio: es un componente de la sal común, y forma también parte de muchos alimentos, aunque también puede ser utilizado como conservador. Puede encontrarse en alimentos que no se perciban como saldados por lo que es importante leer el contenido de sodio de un alimento. Se considera un alimento bajo en sodio cuando aporta menos de 140 mg de sodio por porción.

9. Vitaminas y Minerales: generalmente se expresan en porcentajes de los Valores Nutrimentales de Referencia (VNR), los cuales sirven como guía para valorar la ingestión de nutrimentos de la población sana. Por ejemplo: Hierro 15% significa que una porción del alimento aporta el 15% del total de hierro que se requiere al día.

10. GDA: son guías nutrimentales que se encuentran al frente de los productos y que nos ayudan a ver fácil y rápidamente la información nutrimental. En ella se indica el tamaño de la porción, calorías, grasa saturada, azúcares y sodio. Puede encontrarse desde una sola hasta las cuatro. También nos indican a manera de porcentaje la cantidad de cada uno de los nutrimentos que el alimento aporta con base en una dieta de 2000 kilocalorías.

Aprender a leer una tabla nutrimental ayuda a conocer más sobre los productos que se consumen y a tomar mejores decisiones para cuidar la salud. Es muy fácil una vez que se entiende cada uno de los conceptos, e incluso se puede comparar entre productos para finalmente optar por el más conveniente en términos de nutrición.

Fuente:
insk.com
Junio 7, 2013

Tomado de:

Importancia de la Acidez en los Vinos

Lo primero que debemos diferenciar es el pH de la acidez total del vino. El pH como en cualquier otra sustancia, es el potencial de Hidrógeno (o pondus Hydrogenium) y tiene que ver con las reacciones bioquímicas de nuestro cuerpo (reacciones enzimáticas y flujo eléctrico). El pH se mide en una escala de 0 a 14, donde 0 equivale a una mayor acidez (de hecho, expresa una acidez absoluta), 7 equivale al punto neutro y 14 al punto más alcalino.

Los vinos, generalmente tienen un pH que oscila entre 2.7 y 4.2 Entre menor sea el valor del pH, más ácido es y, por lo tanto, más longevidad va a tener. Cuando el vino supera los 4 de pH, evoluciona demasiado rápido y, por lo tanto, dura menos en nuestra cava.
Por otra parte, tenemos la acidez total del vino, que no es más que la suma de todos los ácidos que componen al vino: acidez fija + acidez volátil. Parece increíble, pero… ¡son muchos los ácidos que se encuentran presentes en el vino!
Por una parte tenemos los ácidos orgánicos naturales y por otra parte, los ácidos orgánicos derivados. Esto es muy sencillo: los ácidos orgánicos naturales son propios de la uva, materia prima con la que se elabora el vino. El predominante es el ácido tartárico (propio de la vid), pero también encontramos el ácido málico (muy vegetal, como cuando mordemos una manzana verde y se nos secan los dientes) y el ácido cítrico (fácilmente reconocible por su presencia en el limón, la toronja y otras frutas cítricas).
Los ácidos orgánicos derivados son producto de las fermentaciones y aquí, debemos recordar que el vino es el producto de la fermentación alcohólica de la uva, es decir, cuando el azúcar que contiene este fruto se transforma en alcohol (y en aromas, y en CO2; y de aquí, también se obtienen algunos ácidos). Además de la fermentación alcohólica, los vinos también suelen realizar una fermentación maloláctica, en donde el ácido málico (muy vegetal que mencionamos en el párrafo anterior) se transforma en ácido láctico (con menor acidez y mayor sensación láctea o cremosa, como yogurt, mantequilla, queso)… De ahí los aromas lácteos del vino! El succínico también entra dentro del grupo de ácidos orgánicos derivados y es formado por las levaduras que realizan la fermentación, proporcionando a las bebidas fermentadas ese gusto específico que le es común: ¡un sabor vinoso
Finalmente, el ácido acético también es un ácido orgánico derivado de las fermentaciones (alcohólica y maloláctica). Sin embargo, todos los ácidos anteriores conforman la acidez fija del vino (ácidos naturales que se encuentran presentes en todo momento), mientras que el ácido acético es parte de la acidez volátil porque, como su nombre lo indica, tiende a evaporarse. El ácido acético da una sensación de vinagre que, en algunos casos desaparece al decantar o trasvasar el vino y dejarlo oxigenar. Sin embargo, otras veces se trata de un defecto por una evolución excesiva y es cuando decimos que el vino está “avinagrado”.
Entre más acidez tenga un vino, mejor armonía vamos a encontrar con la comida mexicana picante, ya que la acidez nos ayuda a refrescar el paladar y mitiga la sensación del picor. De ahí que una cochinita pibil encontrará una excelente compañía en un buen vino rosado que tiene mayor acidez que el tinto.
Fuente:
Terra.com.mx
Septiembre 20, 2013